No se trata de una calle en la que te asalten a punta de pistola o la que más robos sufre. La calle más peligrosa del mundo se encuentra en una esquina, en la que la acera tiene un bordillo casi invisible, todo el mundo se cae al pasar. Es realmente curioso ver como la gente pierde la verticalidad en ese lugar. Casi nadie se salva de caer al suelo.
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